Cuántas más incógnitas aparecen en Miranda de Ebro durante los meses de pretemporada, más y mejor arsenal prepara el Mirandés para no dejar de sorprender al público. Esta vez los factores a tener en cuenta eran la marcha de Chema Aragón acompañada de otro relevo en el banquillo con la llegada de Alessio Lisci. Y, por supuesto, otro lavado de cara a la plantilla con un sinfín de fichajes. Ahora, tras cinco jornadas disputadas, ya ha quedado demostrado que el equipo jabato mantiene su plan intacto: pelear contra todos sin achantarse ante nadie.

Emoción asegurada

No es ninguna novedad que la gran mayoría de partidos del Mirandés prometan emociones fuertes. El ejemplo más claro lo tenemos en la última jornada con ese final de infarto contra el Andorra. Pero lo realmente interesante es ver como cada temporada, el patrón se repite pese a cambiar prácticamente todo el reparto de actores. Los Raúl García de Haro, Gelabert o Roberto López han sido suplidos por los Carlos Martín, Alan Godoy y Gabri Martínez, entre otros.

El Mirandés, un año más, confía en el talento joven | Foto: La Liga

Seguiremos redundando en el mismo tema, pero a cada año que pasa cobra más valor: Anduva es el mejor escenario para que el talento joven irrumpa en el fútbol profesional. Aunque bien sabemos que no es así, da la sensación de que en Mirandés no hay exigencia en cuanto a resultados, solamente disfrutar cada momento. Desconexiones entendibles viendo la edad media de la plantilla durante cada año, pero que no impiden que a final de curso se alcance el objetivo previsto con el plus de dar a conocer, como mínimo, a tres o cuatro nuevos futbolistas preparados para dar el salto a la élite.

Otro curso apasionante

No sabemos si el nuevo séquito de talentos jabatos tendrá más o menos éxito que el de cursos anteriores, pero los primeros pasos han sido, como mínimo, prometedores. Carlos Martín solo ha necesitado un mes de competición para demostrar que puede ser un delantero diferencial al igual que lo fue Raúl García de Haro. Por su parte, Alan Godoy apunta a ese papel de goleador tapado que ya ocuparon anteriormente Roger Brugué o Alejandro Marqués. Y por último Gabri Martínez, con ese rol de extremo desequilibrante que siempre busca tener el conjunto jabato pero que no siempre ha conseguido engranar con el resto del equipo. De nuevo el cóctel perfecto para que el Mirandés sea uno de los equipos más atractivos de ver de toda la categoría.

Gabri Martínez y Carlos Martín, una sociedad que apunta muy alto esta temporada | Foto: La Liga

Tres futbolistas que dan sus primeros pasos en Segunda División, pero que tienen ante ellos el escenario ideal para firmar esa temporada que suponga un punto de inflexión en forma de impulso para sus carreras. En Anduva los disfrutarán, quizá solo durante unos pocos meses, pero de buen seguro que escribirán su propio capítulo en la historia jabata como ya hicieron muchos de sus antecesores.