El Oviedo y la cuestión del primer gol

Anotar el primer gol. Ese chute de adrenalina y felicidad que desnivela la balanza y pone la dinámica del encuentro a tu favor. Esa acción que rompe los esquemas del equipo rival y que en ocasiones le deja sin respuesta. El Oviedo comienza a ser uno de estos últimos, pues cada vez que empieza perdiendo le cuesta un mundo remar y suele acabar marchándose con el bolsillo vacío. Son ya muchos encuentros en los que ocurre esto y en FondoSegunda hemos encontrado un patrón. Te lo contamos.
El que marca, gana
Parece mentira que en un deporte tan impredecible como es el fútbol esta premisa pueda cumplirse, pero en el caso del Oviedo es así. Bien lo saben sus aficionados. Cada vez que el equipo rival se adelanta ya se sabe que, como máximo, los de Cervera solo aspiran a un punto. Partido tras partido sigue la esperanza de que ese día se rompa la racha, pero por uno u otro motivo nunca se consigue. Y así, acumulan 28 jornadas de competición.
Sus aficionados no son los únicos que lo saben, porque los datos no hacen más que refrendar esta dinámica. Ya no solo que no consiga darle la vuelta a los resultados, sino que apenas logran puntuar. El Oviedo ha empezado por detrás en el marcador en 12 ocasiones en las que solo ha sumado 1 punto de 36 posibles. Es decir, el equipo carbayón solo pudo sumar un empate de todos los partidos en los que empezó perdiendo, y fue en La Romareda (1-1) con un gol de Montoro al inicio de la segunda mitad.
La cifra es muy preocupante porque deja en evidencia la dificultad de los carbayones para remar a contracorriente. Pero también la inoperancia para enfrentarse a contextos en los que el equipo rival cede la iniciativa y son los azules los que tienen que proponer. En todos esos encuentros solo fueron capaces de anotar cinco goles y solo consiguieron igualar el choque en una ocasión (frente al Alavés, aunque finalmente perdieron 2-1).
Son muchos los motivos que explican esta situación, aunque el principal y más evidente es que el Oviedo aún no ha marcado dos goles en ningún encuentro liguero y eso, como es normal, imposibilita cualquier remontada. Los problemas con el gol están siendo un quebradero de cabeza para los azules, que ya han visto como las escasas opciones de jugar playoff se disipaban, al mismo tiempo que aparecen los fantasmas por la zona baja, ahora mismo a cinco puntos de distancia.
Se puede ver la taza medio llena
De la misma manera que cuando empiezan perdiendo se sabe que suman pocos puntos, al revés también es digno de mención, pues es muy complicado darle la vuelta al Oviedo de Cervera. De hecho, desde la llegada del técnico solo un equipo fue capaz de hacerlo: el Villarreal B. A lo largo de la temporada los azules se han dejado muy pocos puntos cuando son los que sonríen primero. Hasta en 13 ocasiones se pusieron por delante, consiguiendo 30 puntos de 39 posibles (un 77%) y solo recibieron cinco tantos en contra.
Cervera ya ha reconocido en multitud de ocasiones que se siente mucho más cómodo cediendo la iniciativa al rival, por eso cuando se adelanta su equipo es muy difícil batirle. Y por ahora, gracias a eso el Oviedo ronda por la zona tranquila de la tabla, aún con un cierto margen respecto a la zona caliente de la tabla, pero no se deben descuidar.
Leave a reply
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.