En Noviembre de 2021, rotura completa del ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha. En noviembre de 2022, artroscopia en la misma por inflamación de los tejidos. Noviembres negros, porque antes, en el de 2019, se produjo la misma lesión pero en la rodilla derecha. Una concatenación de desdichas que ha provocado que nunca hayamos podido terminar de enfrentar la irrupción de un jugador que apuntaba a goleador consagrado. Pero ya esta de vuelta y, a sus 25 años, está a tiempo de todo.

Simón Moreno, un goleador de tradición familiar

Para colmo de males, aún debemos recordar que, en el verano de 2019, tras firmar por el Almería, aterrizaba en el club indálico su nuevo dueño árabe y que, con dicha llegada, el delantero quedaba fuera de los planes del club, teniendo que buscar nuevo destino. Procedente de la cantera del Villarreal, terminó por llegar a un acuerdo con el Málaga CF que, finalmente, no lo inscribía por decisión de su propietario. Tuvo que volver al Villarreal B, donde marcó cuatro goles en seis partidos antes de caer gravemente lesionado.

El Mirandés apostó por él con fuerza tras un efímero paso por el Cartagena, donde dejó buenas sensaciones aunque no logró anotar. Tras una primera temporada discreta, arrancaba la pasada con cuatro tantos y dos asistencias en 13 partidos, justo antes de que el infortunio volviese a cruzarse en su camino. Y ahora, tras más de un año de baja, ya ha saboreado lo que es regresar a una convocatoria. El siguiente paso será pisar el verde en partido oficial y cada vez está más cerca. Cada vez deseamos más que llegue, aunque no más que el mismo saborear la sensación de volver a hacer lo que más le gusta: jugar al fútbol, sumar goles.